Antigua Hacienda de Tlalpan

Ambiente relajado y tranquilo propio de una antigua hacienda. Buena cocina pero tienes que ir preparado para la cuenta. Los precios van de acuerdo con la calidad de los alimentos y el ambiente. Me gustaría regresar a comer con un grupo de amigos algún sábado para pasar unas cuatro horas departiendo algunos buenos cortes.

Tenía un recuerdo muy por arriba de la experiencia de hoy. La comida, nada extraordinario, la falta de mantenimiento del lugar me resultó triste (jardines mal mantenidos, el salón de eventos deprimente).Aunque el servicio (los meseros) sigue siendo muy buenoURGE que se pongan al día y atiendan tanto las instalaciones como La Cocina o se van a quedar atrás.Por cierto, si no comes pan o mantequilla asegúrate de mencionarlo y no aceptar que te lo pongan en la mesa, porque te lo cobran aparte.

El ambiente es romántico, elegante, te sientes en otra época, la comida es excelente. Conozco el lugar desde hace muchos años y cada vez lo disfruto mas. La atencion de lo mejor.

Un casco de Hacienda, con un jardín precioso con pavoreales , un oasis dentro de una gran ciudad, comida excelente y precios razonables

Esta un poco retirada pero el lugar es muy bonito para salir un poco del centro de la ciudad con una buena selección de platos mexicanos Tiene su historia y esta muy bien conservado