El Caserio - Biel

Del zumo que pedí antes de la ruta poco se puede decir ya que es de bote pero la atención de los dos camareros explicando de donde es cada animal colgando en la pared y acosejandonos zonas en la ruta hace que se merezca las cinco estrellas

Nos ha gustado! Nos pedimos: Ensalda: Lo que más me gustó, diferente a lo que te puedas encontrar en otros sitios. Una vinagreta muy rica y especial. Croquetas: Pedimos de ciervo y de setas, de textura estaban perfectas, cremosas y buen tamaño, pero no sabía a setas y la de ciervo se apreciaba más la reducción de vino que el propio ciervo en cuanto a sabor. Carrilleras: En su punto, una salsa muy rica, un plato redondo que remataron con unas escamas de bonito seco que no aporta sabor pero le da al plato una presencia muy bonita porque se mueven con el vapor que desprende el plato. Bacalao al pilpil: Pescado en su punto, emulsion perfecta y estaba sobre una base de tomate que aportaba al plato. Canelón de jabalí: Probé la salsa que me recordó al mole poblano mexicano que hacen a base de chocolate, estaba muy lograda y además prometía mucho porque es una salsa que va muy bien con carnes potentes pero no encontré ese sabor a carne en el canelón, lo encontré plano y en el bocado predominaba la salsa. En cuanrto al servicio la chica fue muy agradable. Volvería por la ensalada y las carrilleras.

Restaurante de ambiente rural con una cocina que aúna platos de caza o con ingredientes exóticos. Muy recomendable la oreja crujiente.

He pedido una croqueta de cada de las que había, una de jamón, otra de boletus y otra de trompetilla y otra seta. A las tres croquetas les pasaba lo mismo, la bechamel insípida, inexistente tanto el jamón como las setas

Me ha merecido la pena hacer el viaje hasta alli, la comida excelente, el servicio muy agradable y atento y los platos de caza buenisimos. Un gran acierto. Hay que volver