Musical - Anna

Untidy, not the place it used to be. Not recommended at all. Fantastic location opposite the palace. Frozen food into the fryer onto the place, poor service. Not friendly. For us the worst in the village

What a privilege to be the only tourist in town and even better to enjoy in warm lazy late afternoon in front of the Bar Musical surrounded by sound of rambling fresh water streams which run down the street and splashing sound of nearby fountain. Staff went above and beyond to make us feel welcome. They helped us selecting some of local tapas pincos, freshly grilled pulpas (octopus) and thinly cut tuna slices were just exceptional. Overall, Anna town it's a best sweet nothing place we experienced in our weekly trip around Valencia.

Tuvimos un día muy agradable en un lugar pequeño y encantador. El menú es variado y delicioso. También disfrutamos de la música en vivo. El servicio fue excelente. El propietario es una persona muy cálida y amigable. En resumen, todo es perfecto en este restaurante.

Almorzamos muy bien y el camarero muy agradable,relación calidad precio genial,es de los sitios donde mjor nos han tratado en Anna, haremos x volver Price per person: €10–20 Food: 5 Service: 5 Atmosphere: 5

Bien geolocalizado y tiene calles por donde puedes aparcar con facilidad. Fuimos 2 personas un jueves a las 11:30 de la mañana, porque a las 12:30 teníamos la entrada al palacio Cervelló. Bueno pues la verdad que decepcionante, sólo puedo hablar del trato, porque comida poco pudimos pedir. Al llegar había un camarero que le salude 3 veces, me contesto a la tercera después de verme. Nuestra idea era almorzar allí. Lo típico ensaladilla, medias, café, patatas olivas, etc. Pues nada la forma que tuvo de atendernos fue tan grotesca que me pedí 2 medias y un café. Al preguntarle por la ensaladilla me comentó que ya habían guardado todo que lo que veía era lo que había, vamos en la vitrina nada. Nos quitó hasta el hambre. Espero que fuera un mal día y si es así pues lo entiendo. Pero si es así siempre yo que también trabajé durante 7 años en restauración, como profesional deja mucho que desear.